Dama del amanecer,
que desvelas sus sueños.
Caminas delante de èl,
acariciando sus ojos.
El tiempo caprichoso,
se ha empeñado
a demostrar en tì,
que lo que dicen de èl,
no es verdad.
El carmìn de tu boca,
implora a gritos,
de otros labios la humedad.
Hierve tu sangre,
y tu carne roja
necesita respirar.
La seda
que oculta tu cuerpo,
pide ser razgada.
y tù ....
solitaria estrella,
sientes tu pasiòn rebalsar.
Seguiràs provocàndolo
en tu andar.
Y èl...
te seguirà mirando.
Esperaràs alguna palabra,
y el no dirà nada,
por miedo a tu rechazo.
( me lo ha dedicado un poeta amigo )
No hay comentarios:
Publicar un comentario